Una novela de gran sensibilidad. Corta, entretenida y muy humana. El protagonista central, Pereira, es un periodista, viudo, encargado de la sección de cultura de un periódico portugués. Transcurre en una época especial, durante el régimen Salazarista en Portugal y la Guerra Civil en España. El periódico es dirigido por un hombre afín al régimen. Pereira, que siempre se jactó de ser apolítico, vive en el pasado. Conversa con el retrato de su difunta esposa y escribe en el periódico artículos sobre escritores franceses de siglos pasados. Planea a su columna incorporarle una sección de necrológicas. Sin embargo su vida sufre un vuelco inesperado. Contrata a un joven para ayudarlo a escribir dicha sección, Francesco, a quien eligió tras leer su tesis que trata sobre la muerte. Que le pide Pereira a Francesco? que escriba necrológicas sobre escritores aún vivos, de forma de estar preparados por si alguno se muere. Sin embargo Francesco resulta ser un enamorado de la vida, involucrado con la situación política del momento. Las necrológicas que le va entregando son de alto contenido político y sobre escritores que no son del estilo que busca Pereira, quién las cataloga como impublicables, pero sin embargo las lee y las guarda. A todo esto, comienzan a generarse un montón de dudas en Pereira. Por un lado, se muestra como indiferente al entorno político, pero por el otro, ayuda a Francesco en reiteradas oportunidades, busca enterarse de las cosas que pasan intercambiando ideas con el mozo de un bar que frecuenta y con un sacerdote conocido.
El vuelco en su personalidad se clarifica para Pereira cuando conversa con un médico en una clínica. Concurre a dicha clínica por recomendación de su cardiólogo, ya que se encuentra pasado de peso y tiene problemas de corazón. El médico, el Dr. Cardozo, le escucha y le presenta su teoría acerca de que en su interior tiene más de un alma que están luchando para ver cuál es la dominante. Pereira sale de allí externamente más delgado e internamente más claro. A partir de allí, todo transcurre rápidamente, y Pereira termina involucrado hasta lo más profundo con la situación de su país.
Hace ya unos cuantos años, vi la película y me gustó. Supe luego que estaba basada en un libro, que preferí no leer, ya que no me gusta leer un libro luego de ver la película, prefiero hacerlo al revés. Deje pasar el tiempo y ya de la película solo me acordaba que me había gustado, pero se me había borrado la trama, las caras, los lugares. Consideré que era la hora de leer el libro. Que más puedo decir? Que el libro me encantó. Y ahora, me gustaría ver la película nuevamente.
1 comentario:
Adhiero a su situación de leer primero, mirar despues. Aunque muchas veces lamento que grandes peliculas me resulten insulsas luego de un gran libro. La última que recuerdo fue Jurassic Park, la película está buena, pero el libro de Michael Crichton salió en Argentina un par de meses antes y me pareció espectacular. Tanto, que la pelicula solo quedó resumida a los efectos especiales. Como sea, leeré "Sostiene Pereira" (no se donde me suena mucho el nombre, ya me acordaré). Le comento además que ayer, comencé a leer La tía Julia y el escribidor. Asi que, oportunamente será informado de su consagración / condena como integrante oficial del elenco estable de recomendadores de libros. Saludos!.
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